Estas son las principales señales de advertencia de los dolores de cabeza y la epilepsia infantiles.

Estas son las principales señales de advertencia de los dolores de cabeza y la epilepsia infantiles.

Los casos más habituales en las consultas de neurología infantil son los traumatismos del neurodesarrollo, entre otros los que incluyen el TDAH, los traumatismos del espectro autista, el retorno global del desarrollo o la discapacidad intelectual y otros específicos del aprendizaje. Además, frecuentemente existen otras patologías como dolores de cabeza o epilepsia.

Con todo, defendió el doctor Fernando F. Martínez Calvo, especialista en neurología infantil en Hospital Quirónsalud Zaragozael diagnóstico previo es “fundamental”, y para ello se necesitan unidades de Neurología mantener contacto con las unidades de Pediatría promover este trabajo multidisciplinar y el tratamiento personalizado de estas patologías.

Las señales de alerta de los dolores de cabeza infantiles, tal y como los describe este experto, son la aparición de vómito asociado al dolor de cabeza; la aparición de dolor de cabeza, predominantemente nocturno, que despierta al paciente; así como un inicio en los primeros años, durante 5-6 años.

A causa de la epilepsia, el doctor Martínez Calvo refirió un descenso en el rendimiento académico, con motivos que le permitieron fallecer sin darse cuenta, así como episodios de pérdida brusca del conocimiento que acompañaron a morderse la lengua o perder el control de los efectos.

Los tratamientos para el dolor de cabeza y la epilepsia en niños son farmacéuticos, tal y como afirma este neurólogo pediatra, indicando que existen tratamientos disponibles para prevenir o reducir el número de dolores de cabeza o episodios convulsivos. «Después de eso, los pacientes también pueden recibir otros tratamientos farmacéuticos que se aplican al mismo tiempo que el dolor de cabeza o las convulsiones para tratar de abordarlos».

Trastornos de neurodesarrollo

Además, el doctor Martínez destacó el principio de que los traductores de neurodesarrollo son habituales en las consultas de neurología pediátrica. Aquí puede afectar a distintas áreas o variaciones al mismo tiempo, como puede ser la cognición, el lenguaje, la motricidad o la conducción.

De oreja a oreja Manual de diagnóstico y evaluación del trauma mental (DSM-5), de 2013, considera las transformaciones del desarrollo neurológico en las siguientes personas, según la enumeración de Martínez Calvo: discapacidad intelectual, transformaciones del espectro autista (ATE), TDAH, transformaciones motoras u otras con inicio del desarrollo período, transformaciones de la comunicación, o por ejemplo el curso específico de aprendizaje (como el curso específico de lectura).

Este experto de Quirónsalud Zaragoza conoció que estas cosas deben manifestarse de forma temporal, lo cual es habitual antes de ingresar al colegio, y se caracteriza por déficits en el desarrollo que producen alteraciones en el adecuado nivel personal, social o académico del menor.

“Se trata de alteraciones o repercusiones en el desarrollo del sistema nervioso central, que se manifiestan como disfunciones cerebrales, que afectan la capacidad de aprendizaje y la competencia social, entre otras habilidades, impidiendo el normal desarrollo del niño”, aclara.

En estos casos también es fundamental, en el corazón del neuropediatra, un diagnóstico temporal, que se aloja gracias al buen conocimiento por parte de los padres de quien es un neurodésarrollo normal, así como a la observación y revisión. de los pediatras.

“En las enfermedades neurodegenerativas se realizan estudios genéticos que analizan la sangre en busca de uno o más genes que expliquen la causa de la patología, lo que permite realizar tratamientos genéticos en futuras crías, así como tratamientos individualizados en circunstancias concretas”, concluye. Doctor Fernando F. Martínez Calvo, especialista en neurología infantil de Quirónsalud Zaragoza.