Pecco Bagnaia ha recibido una buena noticia. El piloto de Ducati cojea ligeramente tras el atropello que sufrió en Montmeló y que, en un principio, hizo temer por su vida. Afortunadamente solo sufrió múltiples golpes y ninguna fractura a pesar de las espeluznantes imágenes, en las que se ve cómo la moto de Brad Binder pasa por encima de sus piernas después de que el turinés se cayera abruptamente a pocas curvas de la salida. Este jueves pasó la pertinente revisión médica y los galenos del Mundial, capitaneados por el doctor Ángel Charte, le concedieron el ‘apto’. Asegura que no está al cien por cien pero tomará la salida para defender los cincuenta puntos que le saca a Jorge Martín, segundo en la general.
«Estoy bastante bien. Me molesta el coxis y la rodilla derecha bastante, pero hemos trabajado muchísimo en estos días. Tengo la suerte de que mi preparador físico es increíble y también los médicos y las personas que me han ayudado en estos días, que no han sido fáciles, porque hemos trabajado muchísimo, de verdad, pero era la única manera de llegar aquí. Estoy muy contento y orgulloso de ellos. Voy a ir mejorando día a día», explicó el italiano en una entrevista concedida a Dazn. A pesar del accidente, Bagnaia se considera un afortunado porque las lesiones pudieron ser muy graves: «Tuve mucha suerte, desde todos los puntos de vista. Debo dar las gracias a Alpinestars, me han salvado de una situación muy complicada. Probaré a correr».
Pecco deslizó que la culpa de la caída, que se produjo el solo sin que hubiera ningún contacto, podría haber sido por culpa del neumático: «Es un trabajo que ha hecho mi equipo. Yo sólo he dicho lo que me ha pasado. Todo lo que hemos visto es que desde la parte electrónica, la mecánica y de piloto no había problemas, así que no hicimos nada malo. Michelin está analizando la goma. La temperatura de la goma estaba bien. Así que veremos».
¡QUÉ MIEDO! 😱 ¡La KTM de Binder pasa por encima de la pierna de Bagnaia después de una salida caótica! 😞
Bastianini llegó pasado a la primera curva y provocó la caída de Zarco, Álex Márquez, Bezzecchi y Di Giannantonio 😱#CatalanGP 🇪🇸 #MotoGP 🏁 pic.twitter.com/MinW2yRSlG
— DAZN España (@DAZN_ES) September 3, 2023
El piloto de Ducati desveló que ha vuelto a ver la caída y el atropello de Binder. Volvió a mostrarse agradecido: «La volví a ver porque no soy una persona muy impresionable. Con otros, sí; pero no tanto conmigo mismo. Vaya golpe. Hace tiempo que no se veía algo así con la Ducati. Tuve suerte de que todos estuvieron muy hábiles al intentar esquivarme, también había cinco menos porque, por desgracias, Enea Bastianini se cayó en la primera curva. Eso fue mala suerte para él, pero buena para mí. Todo junto hizo que saliera bien».
Bagnaia trató de recordar qué sintió en el momento de caer sabiendo que lideraba una carrera con veinte motos por detrás pegadas a su colín: «No te da tiempo a sentir nada. Ya en tierra, vi todas las motos pasar, sólo quería que no me pasaran por encima. Binder hizo lo imposible, pero, por suerte, me atropelló en el mejor punto en el que podía hacerlo. Es difícil dar explicaciones. Mucha suerte y muchos años de evolución de Alpinestar y las protecciones».
La importancia del test de Misano
Ahora toca Misano y Pecco no piensa renunciar a la carrera, en la que las fábricas aprovechan para probas sus evoluciones de cara al próximo año: «Podía ser mejor tener una semana libre para terminar el trabajo, porque todavía falta muchísimo para estar bien, pero me gusta. El fin de semana de Misano siempre es muy importante para nosotros y, para mí, mucho, siempre estoy contento por correr aquí. Me siento como en casa. Toda la gente de la entrada, del circuito, me dejan hacer lo que quiero, así que me siento como en casa». Y se refirió al apoyo recibido durante estos días: «Me dejó con la boca abierta. Siempre he recibido mucho afecto por parte de la gente, esta vez aún más. Me dejaron sin palabras».
Bagnaia evidencio su gen competitivo cuando explicó lo único en lo que pensaba cuando estaba dentro de la ambulancia sin saber aún que lesiones tenía: «Mi primer pensamiento, mientras ya estaba en la ambulancia era intentar volver a correr, incluso por la bandera roja. Habría sido difícil, pero bueno. El deseo de volver a correr en moto es la gasolina más potente que hay. Al menos en nuestro caso». Y concluyó hablando de Misano: «Será un fin de semana donde habrá que apretar los dientes, porque, de todos modos, no estoy del todo bien. Lo intentaremos. Ya lo hice hace dos años, cuando volví después de 20 días por la fractura en la tibia. También el año pasado en Portimao y Jerez, con malas situaciones sobre mi espalda, así que también aquí y ahora».